Now my feet won't touch the ground

Hace como hora y media llegué a mi casa del concierto de Coldplay en el Estadio Universitario y siento que tengo muchisimas cosas que decir al respecto.

Lo primero, supongo, es que me gustaría hacer énfasis en que yo nunca había ido a un concierto en un estadio. Si bien me ha tocado ir a la Arena muuuuuchas veces, los otros lugares que me han tocado, ya se aquí o en otros paíse, han sido más bien pequeños y con menos gente. En vista de lo masivo que era este evento, la verdad me dió gusto ver que la logística para la espera y al acceso estaba bastante organizada y controlada, lo cual es un cambio de mis experiencias previas.

Lo que no cambió fue la agresividad y actitud horrible de la gente. He ido a muuuuuchos conciertos en los útlimos años, y solamente el de los Pet Shop Boys fue desde un asiento lejano, entonces creo que tengo 'experiencia' en esas cosas de entrada general. Fue por esto que estaba completamente conciente de lo que significaba estar en el área general y fue un riesgo que decidí tomar. Sabía que las personas suelen comportarse de manera muy psicópata en estas situaciones, pero la verdad no me esperaba lo que ví. Nunca había visto yo a un grupo de personas tan insoportables y groseras, que respondían a la actitud de 'yo quiero, yo lo obtengo, no me importa a quien me friego', como un buen mexicano que le gusta responder a los estereotípos. La falta de consideración por las otras personas, de respeto por el órden, y de simples habilidades de civilidad y cordialidad es alarmante. Es increíble que en un evento que se supone debe ser de entretenimiento y convivencia, la gente pueda asumir un comportamiento como el que he visto hoy. Pero bueno, en verdad no me sorprende que un montón de niños ricos chiflados se comporten asi, pero aún así me alarma.

Supongo que dejare de lado ese asunto para enfocarme en lo importante de la noche. El precio por los boletos era bastante alto, sobre todo los de la Cancha, pero por fortuna el grupo presentó un espectáculo que estaba a la altura de dicho precio. No me esperaba algo tan visual e impresionante, tan lleno de detalle y sorpresa, que resultó en verdad en una experiencia mágica.

Abrir con Life in Technicolor y cerrar con Life in Technicolor II fue una buena manera de delimitar el viaje en el que nos llevó la banda, en lo que sentí fue una linda mezcla de canciones del pasado y nuevos éxitos. Personalmente soy más fan de los primeros tres discos, y mi emoción con esas canciones fue imposible de ocultar, pero estuve gratamente sorprendida al escuchar las canciones de Viva la Vida, disco que no me convenció mucho cuando salió, y el darme cuenta de que funcionaban muy bien en vivo.

Detalles como las imágenes llenas de color en la pantalla, las esferas que servían también como pantallas, los globos, la rotación por los distintos escenarios, las luces, la pirotecnia, y por supuesto, las mariposas, convirtieron un concierto en todo un espectaculo de primer nivel.

Quisiera poder pensar en cual fue mi canción favorita pero siento que sería quitarle el mérito al paquete completo. Pero para mí canciones como Glass of Water, shiver acústica y Politik fueron momentos muy especiales de la noche, además de los éxitos y sencillos.

Siento que es gracioso que mi momento favorito de la noche haya sido con Lovers in Japan. Me gusta mucho la canción pero no me parecía algo que podía llevar a un clímax dentro del concierto y estaba muy equivocada. Al ver todas las mariposas de colores que soltaron durante la canción en dos ocasiones volando por todo el estadio fue una vista increíble y digna de recordar. Definitivamente una de las mejores cosas que he visto en un concierto.

Me siento aliviada que a pesar de los problemas iniciales el concierto haya sido tan disfrutable y memorable. Definitivamente no me arrepiento de haber aguantado hasta el final ya que cada minuto y cada peso valió la pena. Supongo que esto pone fin a mi muy largo conflicto con Coldplay, se termina mi resentimiento hacia ellos desde el 2006 cuando anunciaron su visita al DF y no vinieron aquí. Ya, ya; me encanta casi todo Viva la Vida, amo Prospekt's March, y el concierto fue fabuloso. Huzzah, tratado de paz firmado.