lunes, 18 de enero de 2010

Soy intelectual, muy inteligente

ay que bonito soy!

Permitan que les cuente una historia.

Hace como 8 meses mi módem inalámbrico llegó al término de su vida útil, en lo que fue un día muy triste para todos los usuarios del internet en mi casa. O sea yo.

Sin embargo, en vez de hacer lo que una persona normal haría ante esta situación, y llamar a la compañía de teléfono para pedir el reemplazo del aparato, sin costo alguno, yo decidí postergar la situación y en vez de eso empecé a usar un modem no-wireless que mi padre tenía guardado.

Este pasado sábado me desperté para encontrar a ese segundo módem muerto. Por una u otra razón que no es necesario explicar, tuve que esperar hasta ayer en la noche para llamar al servicio a cliente y pedir mi nuevo módem. Hoy a las 8 am pasamos por el a la tienda (para evitar contratiempos de entrega).

Llegué a mi casa y si bien en internet con cable servía, el inalámbrico no. Después de 30 minutos de intentarlo, debo presumirles que logré que la inalámbrica funcionara. Pueden referirse al link del inicio.

En tu cara módem Thomson!

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